Fraudes digitales: Estafadores clonan rostros y voces mediante Inteligencia Artificial
- ¿QUÉ PASÓ?
La suplantación de identidad es una de las claves de los fraudes con Inteligencia Artificial (IA) que amenaza a empresas, administraciones y ciudadanía.
El fraude que llevan a cabo con el uso de la IA es a través de la imitación de rostros y voces, lo que se conoce como “deepfake” (falsificaciones profundas).
De esta manera, la tecnología puede crear un audio falso, una copia realista de la voz de una persona.
- ¿Qué dijo Carabineros sobre este nuevo fenómeno delictual?
Según advirtió el OS9 de Carabineros, la tecnología de la IA permite alcanzar resultados muy reales y así conseguir sus objetivos, ya que haciéndose pasar por familiares o conocidos de las víctimas, buscan acceder mediante diversos subterfugios a información confidencial o acceder a sistemas de seguridad los que vulneran para conseguir beneficio económico.
Existe en este mismo contexto, el “vishing” o “pishing de voz” y así asimilar la voz de personas de confianza de las víctimas, con la finalidad de obtener información confidencial o dinero a partir de esta interacción que los afectados.
Como parte de esta práctica, los antisociales utilizan información personal, las que muchas veces estos mismos publican en sus redes sociales. Sin embargo, la ingeniería social les entrega conocimientos y herramientas a los delincuentes para mal utilizar esta información.
- Recomendaciones para evitar fraudes digitales
La Sección Ciberdelitos del OS9 entregó las siguientes recomendaciones:
• Si recibes una llamada o un mensaje inesperado de un familiar pidiéndote dinero o haciéndote solicitudes que parecen fuera de lugar, devuélvele la llamada o envíale un mensaje de texto para confirmar que realmente estás hablando con él.
• Ajusta la configuración de privacidad en las redes sociales y otras plataformas para limitar la cantidad de información personal expuesta. Esto reduce el riesgo de convertirse en víctima de un fraude personalizado.
• Cuando estés frente a solicitudes de información personal, financiera o de acceso al sistema, mantén un nivel saludable de desconfianza, especialmente si la solicitud requiere una respuesta rápida.
Es importante considerar que, a medida que se expanden las capacidades de la IA, las líneas entre la realidad y la ficción se difuminan más, y lo más probable, es que no podamos frenar esa tecnología. Esto significa que la gente tendrá que volverse cada vez más cautelosa.